Lavabos Antiolores: Eficiencia Desde la Instalación
Un lavabo bien instalado no solo mejora el baño: también evita malos olores, ingreso de insectos y reduce costos en mano de obra y mantenimiento.
En cualquier proyecto de remodelación o instalación sanitaria, elegir el lavabo adecuado puede marcar la diferencia. Pero no se trata solo de diseño o tamaño, sino de funcionalidad. Hoy, muchos plomeros y técnicos buscan lavabos que incluyan tecnología antiolores, especialmente en espacios sin buena ventilación o con alta exposición a humedad.
Los nuevos modelos fabricados en rotomoldeo, como los que ofrece Fleximatic, están diseñados con materiales resistentes al sol, a la humedad y al desgaste. Esto los convierte en una opción duradera para viviendas, comercios o espacios públicos. Además, su ligereza facilita el transporte e instalación, algo que los profesionales agradecen al reducir tiempos en obra.
Una gran ventaja de estos lavabos es que ya vienen con un kit de instalación completo, lo cual minimiza errores y evita visitas extra al almacén. El kit incluye:
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Céspol antiolores
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Tornillos
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Taquetes
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Arandelas
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Rejilla de acero inoxidable
Esta solución integral representa un ahorro real en tiempos y costos de instalación, ideal para quienes trabajan bajo cronogramas apretados o buscan eficiencia operativa.
Contar con un lavabo con sistema antiolores e insectos no solo mejora la experiencia del usuario, también reduce problemas posteriores como fugas, malos olores o necesidad de mantenimiento prematuro. Para el profesional de la plomería, elegir un modelo como el 2050, 2051 o 2052 de Fleximatic permite entregar un trabajo más completo, con componentes diseñados para durar.
Elegir productos funcionales desde el inicio evita reparaciones futuras. En plomería, prevenir también es construir mejor.