Instalación de bisagras en puertas
La bisagra es un herraje articulado que posibilita el giro de puertas y ventanas o paneles de muebles. Cuenta con dos piezas: una hoja y una más que va unida a ésta y gira sobre un eje, permitiendo su movimiento circular.
La clásica bisagra está siendo sustituida por unas más modernas que además de brindar buen agarre, cuentan con un diseño estético. Revolucionaron las bisagras para madera, dejaron al lado el modelo convencional y dieron paso a aquellas que siguen cumpliendo con su objetivo en cuanto a capacidad de carga y funcionalidad, pero con la gran ventaja de que algunas cuentan con un pivote para puertas enrasadas, que son completamente simétricas y por lo tanto permiten la apertura de puerta hacia la derecha y hacia la izquierda; además estas bisagras cuentan con tornillos antirrobo.
Instalar bisagras nuevas o reemplazar antiguas es una habilidad fácil de dominar y puede ser muy útil. Para colocar una nueva puerta, primero debes encontrar la ubicación exacta; la mayoría de las puertas requieren un mínimo de dos bisagras: una que se encuentre a 17 cm desde la parte superior del marco de la puerta y otra que se encuentre a 28 cm desde la parte inferior y, en caso de ser necesario, una tercera bisagra en medio de las otras dos para que la puerta no se descentre. Después, debes colocar la bisagra en su sitio sobre la puerta y la jamba o marco, para delinearla cuidadosamente, teniendo en cuenta la profundidad de la bisagra sobre la jamba. Debes asegurarte que la puerta, al igual que la jamba, cuadre bien con las bisagras. Si lo deseas puedes utilizar una navaja para marcar el contorno y así facilitar el corte.
La nueva tecnología ha creado bisagras invisibles diseñadas para interiores que estabilizan la apertura y cierre de las puertas, su composición permite que con el paso del tiempo y uso no sea necesario ajustarlas nuevamente.
Es momento de comenzar a cortar la jamba dándole la forma de la bisagra de manera que se inserte bien, proporcionando estética y soporte. Para llevar a cabo esta acción utilizarás un cincel bien afilado y un martillo, lo ideal es no hacer el orificio demasiado profundo para evitar que con el tiempo la bisagra se afloje; pero, en caso de haber sobrepasado la profundidad, puedes remediarlo colocando un pequeño trozo de cartón entre la jamba y la bisagra. Para poder instalar bien la bisagra debes marcar dónde irán los tornillos para después perforar cuidadosamente con un taladro o desatornillador, con este último se pueden colocar los tornillos de la bisagra, tanto de la puerta como de la jamba. El último paso es unir la puerta a la jamba. Hay que alinear las dos placas de la bisagra para que la que está sobre la puerta coincida con la de la jamba, deslizar los pasadores de la bisagra en su sitio y verificar que la puerta abra y cierre sin ningún problema.
Para un adecuado mantenimiento de las bisagras, como con el paso del tiempo se aflojan y comienzan a rechinar, lo primero que se debe hacer es elevar un poco la puerta con la ayuda de un destornillador para después aplicar un lubricante para puertas, para que lubrique bien hay que abrir y cerrar la puerta varias veces. De esta manera, tendremos en buen estado nuestros protagonistas que dan calidad de vida y comodidad en la oficina y el hogar.