Etiquetas en Escaleras: Clave para la Seguridad
Una escalera mal revisada puede convertirse en un riesgo innecesario. Asegurarte de que cumple con normas y esté en buen estado puede evitar accidentes graves.
En el entorno profesional, ya sea en la construcción, mantenimiento o instalación, las escaleras plegables son herramientas indispensables. Su diseño práctico y su facilidad para transportarse y almacenarse las hacen muy útiles. Sin embargo, también pueden representar un peligro si no se utilizan con las precauciones adecuadas. Muchos accidentes ocurren no por mal uso, sino por descuido al revisar su estado general.
Toda escalera debería incluir una etiqueta visible con información esencial para su uso seguro.
En ella se indica la capacidad máxima de carga, el material de fabricación y la altura nominal. También se hace referencia a normativas como la ANSI A14.2, que aplica para escaleras de aluminio o la EN 131, común en Europa. Estas normas garantizan que el producto ha sido fabricado bajo criterios de resistencia, durabilidad y seguridad. Además, suelen incluir advertencias importantes, como mantener un ángulo de inclinación de 75 grados durante su uso, evitar colocarlas sobre superficies inestables y no exceder el peso indicado por el fabricante. Otro punto clave que señalan es la prohibición de subir al último peldaño y la recomendación de utilizar equipo de seguridad en trabajos a gran altura.
En el caso de las escaleras plegables, el riesgo aumenta si no se revisa el mecanismo antes de cada uso.
Las bisagras, seguros y pasadores pueden aflojarse con el tiempo, oxidarse o presentar juego. Si al desplegar la escalera se siente tambaleante, si los peldaños crujen o si hay dificultad para asegurar sus partes móviles, es momento de retirarla. Intentar repararla con soldaduras o piezas improvisadas no solo es ineficaz, sino que representa un peligro mayor. Lo más recomendable en estos casos es reemplazarla por una nueva en buen estado.
La seguridad en el trabajo comienza con la atención a los detalles. Y aunque las escaleras son herramientas cotidianas, su mal uso o descuido puede tener consecuencias graves. Conocer su información técnica, respetar las advertencias y realizar inspecciones regulares no es opcional, sino parte del compromiso profesional con la seguridad.