El disco ideal para una sierra circular
Las sierras son unas herramienta muy poderosa cuando se requiere realizar un corte, esta depende directamente del disco de corte que se le coloque para realizar su función
El funcionamiento de esta herramienta recae en el disco de la sierra que es impulsado por un motor, otra característica principal es su fuente de alimentación de energía, ya que pueden ser de baterías o directamente de un toma corriente eléctrico.
No obstante, las sierras de cable continúan siendo las más utilizadas ya que en la mayoría de los casos, esto gracias a que llegan a ser más poderosas que las inalámbricas. Sin embargo, las variaciones más importantes se encuentra entre los diseños de la sierra.
Los discos metálicos, por lo general fabricados de acero inoxidable.
Propiamente son la sierra de corte que, en algunos modelos, incorporan dientes con punta de carburo que las hacen más resistentes. El tamaño del disco determina la profundidad del corte que puede realizarse, mientras que el tamaño y disposición de los dientes varía de acuerdo al material y el tipo de corte con el que se quiera trabajar. Para cortar madera, plástico o aluminio se usan discos con dientes planos y trapezoidales. Para cortar madera maciza, contrachapada o melamina, se usa una hoja con dentado alterno que corta en los puntos más altos del diente.
En general, las sierras circulares cuentan con un mango y un interruptor de gatillo para prender y apagar, una tuerca que mantiene la hoja en su lugar y protecciones para proteger al operador de la hoja giratoria.
Los mismos dientes del disco de corte de la sierra incorporan grandes gargantas para un mejor y mayor desahogo.
Los ángulos de ataque grandes eliminan grandes cantidades de madera de desperdicio. Otra opción que ofrecen estas sierras es el ajuste de la profundidad del corte. A través de una palanca de profundidad, que regularmente se encuentra en la parte posterior de la sierra, se ajusta la base sobre la que descansa la máquina. Esto permite que el disco de corte baje más, o suba, con relación a la base de la sierra. Con opciones que van desde un octavo, hasta un cuarto de pulgada, la profundidad de corte dependerá del grosor y el material de la pieza sobre la que se esté trabajando.