3 consejos para mejorar el rendimiento en la aplicación de pintura

Al pintar o repintar una superficie ¿lo realizas con la técnica adecuada? En este artículo podrás conocer lo que debes hacer previamente al aplicar la pintura

La pintura se define como un producto fluido que, aplicado sobre una superficie en capas relativamente delgadas, se transforma al cabo del tiempo en una capa sólida que se adhiere a dicha superficie, de tal forma que recubre, protege y decora el elemento sobre el que se ha aplicado. La pintura contiene tres ingredientes principales: pigmento, aglutinante y disolvente.

El pigmento proporciona la textura, el color y las propiedades de ocultación de la pintura. En el pasado solían ser bastante peligrosos por incluir plomo, cromatos y asbesto, pero actualmente están prohibidos en la mayoría de los países. El dióxido de titanio y los óxidos de hierro son pigmentos seguros de alto grado y se encuentran en pinturas de mejor calidad. Los pigmentos más baratos no se pueden moler tan finamente como se logra con los pigmentos de gran calidad.

Sin embargo, es importante que cada vez que se termine de usar cualquier herramienta, se quiten los restos de pintura antes de que se seque, pues, al endurecerse, acortan el tiempo de uso en el futuro

La suciedad perjudica notablemente la adherencia de la pintura, por lo que nunca viene mal un primer paso de lijado y limpieza de la superficie. Primero se puede usar una escoba o incluso cepillos abrasivos para quitar las imperfecciones. Recomendamos partir desde la parte superior y luego descender; así, el trabajo resultará más práctico. Recuerda eliminar todo el polvo y remover todo lo que cuelgue de la pared o superficie. Si se ha olvidado de limpiar alguna herramienta, o si no quedó bien limpia y cuando la vas a usar se encuentra dura y rígida, se puede sumergir en agua tibia por un par de horas, o bien en disolvente para pinturas sintéticas y esmaltes. Si esto no ha sido suficiente, puedes sumergirla en decapante de esmaltes y frotarla con un cepillo de cerdas.

Una vez que se implementaron las labores de limpieza, deben resanarse todos los agujeros e imperfecciones, con el objetivo de tener una superficie lo más pareja y lisa posible.

Con ayuda de una espátula se puede aplicar el resanador con facilidad. De acuerdo al material de las paredes será el procedimiento que se ocupe. Cada muro tiene una composición diferente, por lo cual se necesitarán productos compatibles con la superficie de la estructura.También, es importante que, después del secado, se lije el resane antes de pintar las paredes o techos.

Finalmente es necesario que se evite la humedad. Un punto importante, y que muchas veces se deja de lado, es el de identificar los rastros de humedad. Se pueden presentar manchas oscuras que resquebrajen y perjudiquen la pintura. Antes de aplicar la pintura, se recomienda identificar si el problema es mayor o se puede dar una solución más práctica antes de pintar la superficie.

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