Ubicación de los centros de carga
Decidir la ubicación de un centro de carga resulta un dilema muy importante, ya que se debe considerar colocarlo en un punto estratégico o tomar en cuenta el diseño del lugar. Lo ideal sería conjugar ambos aspectos. Sin embargo, en la práctica esto no se puede conjugar tantas ocasiones como se desea.
Con esto en mente, el primer punto a considerar es precisamente si se necesita un interruptor, un centro de carga o ambos para las exigencias del lugar. Si la instalación tiene una carga mayor y dispone de varios circuitos, entonces es recomendable colocarlo en el punto más estratégico para que el flujo eléctrico sea el más conveniente.
El criterio para beneficiar este primer punto es el de la geometría analítica; tan sólo consiste en hacer un diagrama a escala de las diferentes cargas parciales, para trazar el centro donde se debe colocar el “centro de carga” precisamente. El inconveniente es que, en ocasiones, ese justo medio puede quedar en un punto inconveniente, ya sea por el lugar en sí o por el impacto visual. Lo importante es determinar qué criterio seguir y ser fiel a la decisión para elegir la opción más precisa.
Un centro de carga es un tablero metálico que contiene una cantidad determinada de interruptores termomagnéticos, generalmente usados para la protección y desconexión de pequeñas cargas eléctricas y alumbrado.
Por otra parte, una de las decisiones más sencillas suele ser la de colocar el centro de carga junto al interruptor principal. Esto facilita la instalación y permite un manejo más sencillo de toda la instalación eléctrica. No obstante, en negocios, hoteles y otra clase de lugares comerciales suelen ocultarse ambos dispositivos, con el fin de no perjudicar la estética.
El interruptor debe estar a menos de 5 metros del medidor, según las medidas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por lo que puede ser que dos gabinetes se vean muy grotescos para los lugares que buscan generar un ambiente agradable, por lo que el electricista también debe considerar un lugar más discreto en esos casos. Así pues, al ubicar el centro de carga cerca del interruptor principal, se prioriza la practicidad de la instalación, y no tanto la eficiencia o el gusto.
Lo cierto es que los centros de carga pueden colocarse en cualquier lugar, siempre considerando las medidas mínimas de altura, que varían de país en país. En México el punto más alto de los centros de carga debe estar a 1.8 metros como máximo, de tal modo que pueda ser manipulado con facilidad. Como entenderás, esa altura se modifica de acuerdo con el promedio de estatura del país en cuestión.
Considerando esta medida, el centro de carga puede ubicarse de acuerdo con cualquiera de los anteriores criterios, pero hay que recordar que a mayor distancia se incrementa la longitud de los conductores, y por tanto también aumenta la caída de tensión. Asimismo, se debe tener en mente que un lugar de difícil acceso no es una buena ubicación para el centro de carga, ya que se requiere control en caso de una urgencia; tampoco se debe colocar atrás de puertas ni en sitios calurosos o demasiado húmedos.