Movimiento constante para un lijado uniforme
Una de las operaciones para la preparación de superficies es el lijado, acción que permite nivelar las superficies y facilitar el anclaje de los diferentes productos de preparación o acabado final.
Sin embargo, ese poder también implica un uso responsable e informado. Existen diferentes máquinas de lijado, y en todas ellas se requiere un movimiento constante para que el lijado sea uniforme. Más allá de esta generalización, las diferentes máquinas tienen diversas características, para lo cual exponemos una lista de ellas a continuación:
Lijadora de banda: Como anuncia su nombre, se compone por una banda sujeta a tensión entre dos rodillos. Uno de ellos provoca el movimiento y el otro mantiene la tensión y controla el desplazamiento lateral. Este tipo de lijadora es utilizada sobre todo en superficies planas. Existe una versión estacionaria y también una pequeña, que facilitan los trabajos. En general, ninguna de estas lijadoras necesita de gran presión y se debe trabajar con ellas realizando pasadas paralelas y superpuestas.
Una máquina de lijado genera un ahorro de tiempo y un incremento en la eficiencia de los trabajos.
Lijadora excéntrica: También se conoce como rotorbital, por la rotación del disco de lijado que la compone. Este disco gira de manera excéntrica, lo cual disminuye el riesgo de estrías o marcas en la superficie. Esta lijadora es ideal para todo tipo de acabados finos. Además, su condición flexible permite que se trabaje con ella en superficies cóncavas y convexas. Por su uso práctico es la máquina más conveniente para quienes no tienen experiencia en el lijado.
Lijadora orbital: Esta lijadora implica un movimiento elíptico de la base donde se asienta la lija. Algunos modelos permiten variar este movimiento, o incluso tienen una función de lijado aleatorio, que disminuye mucho más las estrías de las superficies. No es recomendable usar este tipo de lijadora en superficies muy bastas y en acabados muy finos.
También es bueno recordar que algunos taladros tienen la función de lijado con sus accesorios, o también las llamadas multiherramientas cuentan con esa posibilidad. Lo cierto es que el papel de la lija sigue siendo una herramienta muy usada en el sector ferretero. Los buenos profesionales saben que hay ocasiones en que se debe utilizar la lija con el respaldo, mineral y grado correcto, y no tanto una herramienta veloz, con el objetivo de realizar trabajos más limpios. En ese sentido, invitamos a todos nuestros lectores a practicar con responsabilidad y eficiencia este importante proceso de abrasión.