Limpieza en la soldadura de tuberías de cobre
Cuando pensamos en una instalación —ya sea para proporcionarnos agua, gas o incluso calefacción— el primer requisito que podemos exigirle es durabilidad.
Que sea confiable para que nos olvidemos de fugas y peligrosas eventualidades por mucho tiempo. Dichas virtudes dependerán en buena medida de la calidad de los productos y materiales utilizados en nuestras instalaciones. En una instalación de tuberías de cobre, también son factores decisivos detalles como el qué tan capacitado o actualizado esté quien decida poner manos a la obra.
Es muy utilizado en tuberías que conducen agua o proveen calefacción y refrigeración a edificios enteros. Sin embargo, hay que tener en cuenta dos factores: Uno, su precio es más elevado que el de otros materiales que, aunque cumplen las mismas funciones, son menos resistentes; y, dos, su instalación requiere cierta capacitación.
El cobre es un material con muchas ventajas. Ideal para usarse en nuestras instalaciones, es liviano, maleable, fácil de unir, no tóxico y resiste la corrosión.
El proceso: Marcas y limpieza en la soldadura
Primero, hay que medir y cortar con exactitud los tubos. Empleando un cortador tipo disco, debemos cortar en ángulo recto. Es importante que el primer corte que se haga con el cortador sea muy ligero, con poca presión y sólo para marcar en el tubo la altura a la que queremos nuestro corte. Ejercer demasiada fuerza puede deformar el tubo. Una vez cortados, los tubos deben ser limpiados y lijados cuidadosamente junto con las conexiones o codos a utilizarse. Este proceso es muy importante por dos razones.
La primera es porque con esta limpieza removemos cualquier rebaba o sobrante que pudiera estar aún adherido en el interior. La segunda es que la limpieza de los extremos de nuestros tubos y codos, tanto en su interior como en su exterior, es realmente un proceso de abrasión que retira la capa más superficial del cobre. En esa área lijada es donde se posicionará el estaño que usaremos al momento de soldar.
Para esta labor, existen herramientas para hacer la limpieza o abrasión de los tubos con el rigor que se requiere; nos referimos a cepillos y anillos que limpian el exterior e interior de los tubos de media y tres cuartos de pulgada. El uso de estas herramientas limpiadoras de tubos de cobre no sólo facilitará el trabajo, sino que también lo hará más preciso.