Lija de metales no ferrosos y acero inoxidable
Hay diferentes tipos de lija para metales no ferrosos, por ejemplo, con los granos de óxido de aluminio se puede lijar madera y aceros suaves, presentan alta resistencia al desgaste y son ideales también para madera
Tipo de grano:
Los de carburo silicio tienen la propiedad de ser muy puntiagudos y de ofrecer siempre nuevas aristas, por lo que ofrecen un mejor acabado que ningún otro mineral. Son utilizados para lijar metales no ferrosos, como el cobre y el aluminio; así como el vidrio, plástico, piedra y cerámica. Por otro lado, los granos de óxido de aluminio, que se encuentran de forma natural como corindón, presentan alta resistencia al desgaste y su uso es muy versátil; con ellos podemos lijar desde un sustrato de madera hasta aceros suaves. Es un grano, redondo, sin aristas agudas, tenaz y de alta durabilidad. Es apropiado para el lijado de materiales de virutas largas, como el metal y la madera. También son indicados para el lijado de paredes enlucidas.
No obstante, hay diferentes tipos de máquinas para lijar metal.
Consejos para lijar metal
- Ubicar las características del material que se lijará: Es decir, si es resistente o no a altas temperaturas (si se utiliza para el proceso del lijado) y tomar en cuenta su dureza y tenacidad
- Elegir el soporte de la banda más adecuado para la operación de lijado que se quiere realizar.
En el proceso:
- La máquina tenemos que mantenerla bien sujeta con las dos manos durante el lijado y deberemos de apagarla para el cambio o sustitución de la lija.
- Lo óptimo es empezar lijando las áreas más afectadas y luego seguir con las zonas menos perjudicadas por el óxido.
- Realizar un escalado de granos adecuado teniendo en cuenta el estado inicial de la pieza y el nivel de acabado que deseamos.