Las Partes del Micrómetro y sus Tipos
Con una diversidad de modelos que dependen del tipo de medición que vaya a realizarse, los micrómetros son aparatos exactos que se rigen por normas nacionales e internacionales que avalan sus mediciones.
Partes
En la actualidad, pueden encontrarse en el mercado una gran variedad de modelos de micrómetros incluidos los digitales. De forma general, las partes de un micrómetro siguen siendo las mismas, aunque los diseños de los modelos más vanguardistas pueden incluir partes nuevas como pantallas LCD y prescindir de otras como el trinquete.
Cuerpo: Constituye el armazón del micrómetro, suele incluir placas de aislante térmico, para evitar variaciones por dilatación en la medida.
Tope fijo: Determina el punto cero de la medición y es el elemento de contacto de un lado de la pieza a medir. Está hecho de metales rígidos como acero o hierro para evitar el desgaste.
Espiga: También conocida como tope móvil, es elemento que determina la lectura final del instrumento. En su punta, suele tener también metal rígido para evitar el desgaste. Es el elemento del otro lado de la pieza a medir.
Seguro: Permite bloquear el desplazamiento de la espiga.
Tambor milimétrico fijo: Parte del armazón o cuerpo del micrómetro. En esta parte está grabada la escala fija.
Tambor milimétrico móvil: Es parte de la espiga o tope móvil, ahí se encuentra grabada la escala circular o móvil.
Trinquete o freno: Limita la fuerza ejercida sobre la espiga al realizar la medición, ya que una presión excesiva sobre esta, arrojaría mediciones incorrectas.
Tipos
Los micrómetros pueden dividirse, primero, en mecánicos y digitales; y, segundo, según las medidas a realizar. De esta forma, hay micrómetros para hacer mediciones exteriores (el ancho de una tuerca), interiores (el diámetro interior de una tuerca) y de profundidad (la profundidad de una ranura o hueco). Otras categorías útiles para entender la versatilidad de estos instrumentos, incluyen:
Por unidad de medida: Los micrómetros que miden usando el sistema decimal, emplean el milímetro como unidad de longitud, mientras que los micrómetros que miden bajo el sistema inglés, usan la pulgada como unidad de medida.
Por normalización: Los micrómetros estándar son para uso general en cuanto a apreciación y amplitud de medidas. Los micrómetros especiales se usan en mediciones específicas y procesos especiales de fabricación o verificación. Por la forma de los topes. Hay micrómetros de planos paralelos, que son los más usuales para medir superficies planas paralelas.
De puntas cónicas para roscas, que miden la distancia entre los filos de una superficie roscada. De platillos para engranajes, que cuentan con platillos para medir las distancias entre los dientes de los engranajes. Y, de topes radiales, útiles para medir los diámetros en agujeros muy pequeños.