Diferencia entre CPVC y PVC
Una de las características que marca una diferencia entre las tuberías 𝐏𝐕𝐂 𝐲 𝐂𝐏𝐕𝐂 es que una contiene más cloro, lo cual ayuda a proteger de esta manera su composición y permite el paso de agua caliente.
Es importante empezar por señalar que el PVC y el CPVC comparten el origen de su desarrollo, pero no son lo mismo y en efecto tienen aplicaciones distintas. El PVC generalmente se usa para tuberías y drenajes subterráneos de agua fría, siendo poco recomendable para transportar agua caliente. Y es que, en el PVC un átomo de cloro ocupa el 25% de los sitios de enlace en la red troncal de carbono, mientras que los sitios restantes se llenan con hidrógeno.
El CPVC difiere del PVC en que aproximadamente el 40% de los sitios de unión en la cadena principal están llenos de átomos de cloro.
Es por esto que a medida que aumenta el contenido de cloro en el CPVC, la temperatura de transición vítrea (temperatura en la que el polímero pasa del material duro y vítreo a un material blando y elástico) aumenta significativamente. Son precisamente las moléculas de cloro adicionales las que protegen la cadena principal de carbono del polímero, que a su vez protege su integridad estructural contra el calor. Por esta razón, las tuberías de PVC sólo pueden manejar temperaturas de hasta 60°C a baja presión, mientras que las tuberías de CPVC pueden soportar temperaturas superiores a los 80°C con mayores presiones, esto lo convierte en una opción muy sólida y segura. La diferencia mecánica entre el CPVC y PVC es que el CPVC es mucho más dúctil, permitiendo una mayor flexión y resistencia a la compresión. Además, la resistencia mecánica del CPVC lo convierte en un candidato ideal para reemplazar tuberías metálicas que se ven expuestas a condiciones de corrosión que les irán mermando su desempeño y vida útil en el mediano plazo.