Dame 1: Recubrimiento en polvo
El estuco es un recubrimiento decorativo para enlucir muros y techos, brindando gran versatilidad en acabados y texturas. Se trata de una pasta hecha fundamentalmente con yeso, resinas y pigmentos naturales. Abordaremos el recubrimiento en polvo:
En este sentido, aplana, afina y da color logrando texturas únicas. De fácil aplicación para interiores y exteriores. Es un recubrimiento en polvo compuesto por Cemento Portland Cruz Azul blanco, cargas minerales, pigmentos y aditivos químicos, es fácil de trabajar y de gran adherencia. Ideal para dar acabados y texturas finales coloreadas a muros, bardas y fachadas interiores o exteriores, proporcionándoles resistencia a la humedad.
Interiores y exteriores
A este material sólo se le tiene que adicionar agua y destaca por la posibilidad de ser aplicado tanto en interiores como exteriores y adaptarse a cualquier estilo de decoración. Una de sus características es la fortaleza que aplica a las superficies donde es impregnado y su capacidad de impermeabilidad. Al venir adicionado con pigmentos, da color en un solo paso y no requiere un sellador acrílico para pintarse posteriormente. Su rendimiento podrá variar dependiendo de las condiciones de aplicación, nivelación y rugosidad del sustrato, así como del espesor de la capa aplicada y el acabado final que se dé.
Efecto marmoleado
El estuco veneciano es un acabado similar al mármol con brillo y el toque especial de distinción típico de los palacios venecianos, rebosantes de estilo italiano.
Para lograrlo se necesita un par de lijas, una espátula y una llana. El secreto de esta técnica radica en aplicar varias capas de estuco dejando pasar varias horas de secado. Para el brillo se fricciona la última capa con la espátula, posteriormente se mancha la superficie con cera para abrillantar y proteger el estuco.