Retos de la plomería actual
Siendo sinceros, no siempre es fácil distinguir entre un plomero experimentado y confiable; de otro que realmente es apenas un aprendiz; o tal vez de un plomero con muchos años de ejercer el oficio, pero sin la información o técnica correcta.
Algunos problemas y errores que pudiera generar un técnico que ejerce la plomería inadecuadamente, pueden ser como: fugas en la instalación, instalaciones desniveladas y torcidas, errónea selección de materiales, tuberías que no coinciden, el desconocimiento de la normatividad en instalaciones, o la selección errónea de selladores, adhesivos y cementos disolventes, esto sólo por mencionar algunas de las situaciones más generales.
Un plomero en proceso de aprendizaje es aquella persona que muestra interés por el oficio y posee algunos conocimiento técnicos del campo, sin embargo, no ha podido practicar lo suficiente; por ello, un aprendiz mantendrá conocimientos básicos sobre la plomería con pocas horas de experiencia en la aplicación de dichos aprendizajes. No es recomendable que aquellos técnicos aprendices realicen trabajos de plomería por su cuenta sin la supervisión de un maestro plomero.
El modelo ideal de formación para el técnico en plomería es combinar suficiente preparación teórica, con mucha práctica profesional.
El modelo ideal de formación para el profesional en plomería, debe combinar la suficiente preparación teórica con mucha práctica profesional, pues un aprendizaje sin el otro puede generar un problema serio para el técnico. A pesar de la que en el mercado abunda una gama de cementos de mayor calidad y prestigio, se siguen detectando muchas dudas respecto a la disponibilidad en ferreterías y a la diferencia entre un cemento disolvente y un pegamento común.
Uno de los errores más frecuentes en el campo es el uso de cementos disolventes para la unión de tuberías, que suele darse a conocer por el desconocimiento de la aplicación del cemento en las superficies a unir o la aplicación en una sola de las piezas. Otros problemas que abundan son el utilizar un cemento disolvente que se ha secado parcial o completamente antes del montaje de la junta; utilizar un cemento parcialmente “fibroso” lo que lo hace incapaz de ejercer la disolución de las paredes del tubo o la conexión.
Es importante mencionar que estas situaciones no solamente persisten por la falta de conocimiento del producto, también pueden generarse por los fallos en la unión vienen por una inadecuada limpieza y preparación de la superficie; por condiciones climáticas adversas, ya que el exceso de humedad, calor o frío tienen un gran impacto en la creación de juntas adecuadas, así como una de las causas más comunes en la unión deficiente de tuberías que tiene que ver con la inadecuada selección del cemento disolvente.
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