Los centros de carga y el interruptor de seguridad
Entender de mejor manera cómo funcionan los centros de carga ayudará a verificar que el recurso con el que se cuenta en nuestro entorno sea el adecuado.
Primero hay que entender a los centros de carga. Se trata de aquellos tableros metálicos que soportan cierta cantidad de pastillas termomagnéticas. Su función es la que todo edificio, vivienda o negocio necesita: administrar la energía eléctrica y distribuirla en los diferentes puntos que la requieran. La energía eléctrica se concentra en el centro de carga; a partir de ahí, se distribuye a través de los diferentes cables o tomas de circuito. En última instancia, un centro de carga puede proteger el circuito cortando la tensión eléctrica; por este motivo, en una pequeña instalación puede ser suficiente un centro de carga para realizar la doble función de administrar y proteger.
La ubicación del interruptor de seguridad está regulada, debe estar a una distancia máxima de 5 metros del medidor.
Interruptor de seguridad. Dispositivo de desconexión, bastante conocido por el uso de cuchillas. Este dispositivo se encuentra dentro de un gabinete que tiene la función de proteger contra contactos involuntarios y también para resguardar al equipo contra las condiciones ambientales, como altas temperaturas o humedad. Como vemos, la función de este interruptor es básicamente proteger en caso de que la tensión eléctrica rebase los parámetros. Para cumplir este objetivo, puede incluir un portafusibles, además del dispositivo de cuchillas. Para adaptarse a distintas exigencias, los interruptores pueden ser de uso general o pesado.
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