Instalación eléctrica segura con la puesta a tierra
El cableado eléctrico conecta e interactúa con interruptores, enchufes, equipos, sistemas de iluminación, electrodomésticos, medidores, fusibles y pastillas electromagnéticas, entre otros, sin embargo, lo más importante es que la instalación brinde un servicio eficiente por mucho tiempo con las condiciones más seguras para los usuarios.
La energía se distribuye desde el centro de carga a varios circuitos derivados para iluminación, electrodomésticos y enchufes eléctricos. Se requiere una planificación cuidadosa para que el sistema de distribución suministre de manera segura y eficiente, el servicio eléctrico adecuado para las necesidades presentes y futuras.
Algunos de los elementos esenciales de la instalación son la acometida, el centro de carga, medidor eléctrico, pararrayos y cable de tierra.
La puesta a tierra consiste en la instalación de cables de protección que van desde cada uno de los tomacorrientes o enchufes, hasta la tierra física (el terreno) con el fin de que si hay una corriente de fuga. A estos cables se deben conectar los aparatos eléctricos con partes metálicas, como por ejemplo la lavadora. En el terreno se deberá enterrar un “electrodo” o “Pica” en contacto directo siempre con el terreno. Todos los cables de la instalación de la puesta a tierra estarán unidos, mediante la instalación de la puesta a tierra, directamente con esta pica o electrodo.
Es una norma hacer conexiones “puesta a tierra” de superficie metálicas que sean conductoras de electricidad, como ventanas, lavabos, regaderas o tuberías, con el objeto de evitar posibles descargas eléctricas. Es importante tener instaladas pastillas termomagnéticas para control de fugas. Y verificar fallos en los electrodomésticos, como lavadoras que pueden propagar la fuga eléctrica por los tubos de cobre.
Para realizar un sistema de puesta a tierra se necesitan conductores y electrodos de tierra que son cuerpos metálicos desnudos (generalmente de cobre), cuya función es establecer el contacto con la tierra física.
Estos deben ser resistentes a la corrosión por las sales de la tierra y deben ser enterrados a una profundidad de 3m para servir como el elemento que disipará la corriente en la tierra en caso de alguna falla de nuestra instalación o de alguna sobrecarga.
Recomendamos revisar periódicamente la instalación eléctrica de su casa, de esta manera podrá encontrar a tiempo conexiones en mal estado, interruptores defectuosos, evitará posibles accidentes, ahorrará en el consumo de electricidad y en reparaciones de su instalación o de sus aparatos eléctricos. Tenga en cuenta que debe desconectar primero el interruptor general antes de efectuar cualquier reparación.
