Fundiendo el metal: el desafío de la soldadura

Publicado en: Notas | 28 junio, 2023

La soldadura es una disciplina que requiere tanto destreza técnica como conciencia de seguridad. En este artículo, exploraremos temas fundamentales que rodean a la soldadura, Aprenderemos cómo protegernos adecuadamente de las quemaduras y descargas eléctricas, así como la importancia de recibir una capacitación sólida en seguridad laboral para evitar accidentes. 

El “near shoring” se presenta como una oportunidad emocionante y rentable para los técnicos soldadores en México. La demanda creciente de mano de obra local en la industria de la soldadura abre nuevas perspectivas de empleo y desarrollo profesional. Sin embargo, para aprovechar al máximo esta oportunidad, los técnicos deben mantenerse actualizados, ofrecer servicios de alta calidad y destacar en un mercado cada vez más competitivo. El “near shoring” no solo implica proximidad geográfica, sino también excelencia en la soldadura y capacidad para satisfacer las demandas de los clientes en términos de calidad y eficiencia.

La máquina de soldar por arco eléctrico tiene como función principal proporcionar la corriente eléctrica necesaria para crear y mantener un arco entre el electrodo y la pieza de trabajo. Esta corriente genera el calor necesario para fundir los metales y formar una unión sólida. La máquina controla la intensidad de la corriente eléctrica, la polaridad y otros parámetros para adaptarse a diferentes tipos de electrodos y materiales a soldar. Algunas máquinas pueden regular la velocidad de alimentación del electrodo; el control de la protección gaseosa en procesos de soldadura con gas; la configuración de los modos de operación; la protección contra sobrecargas y la monitorización de parámetros clave durante la soldadura.

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El papel crucial de los electrodos en la manipulación precisa del metal.

Los electrodos: Cada electrodo está diseñado para cumplir con ciertos requisitos de soldadura, como el tipo de material base, la posición de soldadura y el tipo de corriente utilizada. Es importante familiarizarse con el sistema de clasificación de electrodos, que generalmente se basa en un código alfanumérico. La primera parte del código indica el tipo de revestimiento y el tipo de corriente adecuada para su uso. Por ejemplo, los electrodos con revestimiento básico (como el E7018) son adecuados para soldaduras en posición plana y vertical, mientras que los electrodos celulósicos (como el E6010) son más adecuados para soldaduras en posición horizontal y sobre cabeza.

  1.  Partes. Los electrodos se componen de: alma o varilla y revestimiento. El primero es un alambre desoxidado de escasos milímetros de diámetro; el segundo se obtiene de la combinación de diversos materiales, que se adaptan al modo de empleo.
  2. Cátodo y ánodo. Así se denomina a las polaridades de los electrodos. El cátodo es la negativa, y el ánodo, la positiva. El uso de cada una depende del tipo de arco en el que se realizará el procedimiento.
  3. Colores. A menudo, la diversidad de colores determina aspectos como los materiales, las funciones, la resistencia y algunas otras especificaciones de cada tipo de electrodo.

Existe una numeración en cada electrodo que nos indica, de manera innegable, sus características básicas: el sistema de numeración de la American Welding Society (AWS), que presenta un formato como éste: E-XX-Y-Z.

  • La letra “E” señala que es un electrodo para soldadura por arco.
  • La cifra “X” indica la resistencia a la tensión del electrodo; se mide en libras por pulgada cuadrada.
  • El número “Y” representa las posiciones en las que puede utilizarse (horizontal, vertical, techo, etc.).
  • En tanto que la cifra “Z” expone el tipo de revestimiento y la polaridad en la que la soldadura tendrá mayor eficiencia.

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La capacitación en seguridad laboral y el cumplimiento de las normas y procedimientos establecidos son fundamentales para prevenir accidentes y garantizar un entorno de trabajo seguro.

El riesgo de quemaduras: 

Uno de los riesgos más importantes en el oficio de soldadura es el peligro de sufrir quemaduras. Debido al uso de altas temperaturas en el proceso de soldadura, es fundamental utilizar adecuadamente los equipos de protección personal para evitar lesiones en la piel. Otro riesgo significativo es la inhalación de humos y gases tóxicos. Durante la soldadura, se generan vapores y gases nocivos que pueden ser perjudiciales para la salud si se respiran en grandes cantidades o de manera prolongada. Es esencial trabajar en espacios bien ventilados y utilizar sistemas de extracción de humos para minimizar la exposición a estas sustancias

El dominio de la energía eléctrica: 

En el oficio de soldador existe el riesgo de sufrir cortes, pinchazos o lesiones por salpicaduras de metal caliente. Es importante manejar correctamente las herramientas y equipos de soldadura, así como utilizar equipos de protección para los ojos y las manos. Asimismo, se debe tener precaución con los riesgos eléctricos asociados al trabajo con equipos de soldadura. Un manejo inadecuado de las fuentes de energía eléctrica puede resultar en descargas eléctricas o cortocircuitos. Es necesario seguir las normas de seguridad eléctrica y contar con la capacitación adecuada para evitar estos peligros.

Por último, se debe tener en cuenta el riesgo de incendios y explosiones: La soldadura involucra el uso de materiales inflamables y la generación de chispas y calor intenso, lo que puede causar incendios si no se toman las precauciones necesarias. Es fundamental contar con extintores adecuados, mantener un entorno limpio de materiales inflamables y seguir los protocolos de seguridad contra incendios.

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