Desarrollo de apps: un encuentro con el destino

La pandemia de COVID-19 ha cambiado los hábitos de consumo, ahora el uso de apps de compras ha aumentado de manera acelerada y no como una práctica, sino como una nueva forma de vida que garantiza seguridad, agilidad y comodidad.

Una aplicación móvil o app móvil (de la palabra inglesa application) es una herramienta de software, escrita en varios lenguajes de programación y diseñada para ejecutarse en dispositivos móviles, como teléfonos inteligentes y tabletas, donde se instalan y realizan funciones concretas dependiendo de su especialidad, ya sea para cubrir necesidades personales o profesionales.

Su objetivo radica en facilitar la resolución de alguna tarea determinada, en cualquier momento y en cualquier lugar; para ello, se caracterizan por ser fáciles de instalar y de acceso directo e inmediato, dinámicas, útiles y muy sencillas de operar (con algunos cuantos clics).

Por consiguiente, el mercado de los negocios electrónicos ha crecido muy rápido, provocando que muchas tiendas online apuesten por las e-commerce apps, como una extensión de sus páginas webs, para así seguir creciendo y vendiendo.

De ahí que exista toda una infinidad de apps móviles, pues al responder a las necesidades específicas de los usuarios, pueden desarrollarse por instituciones, medios de comunicación o de entretenimiento, empresas, marcas o comercios, etcétera, quienes conectan a los consumidores con sus servicios y productos a través de este tipo de software.

En el caso de las aplicaciones de comercio electrónico (e-commerce app), además de crear experiencias efectivas de compra en línea, ayudan a que las empresas crezcan en audiencia, maximizando su posicionamiento en la mente de los consumidores y optimizando las interacciones de sus canales digitales.

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