Pulido y abrillantado

Además de aportar valor cosmético, el pulido de metales también tiene un propósito práctico. Debajo de la superficie, elimina la oxidación y previene una mayor corrosión del metal, prolongando significativamente su vida útil.

El paso del tiempo afecta a todos los materiales, particularmente a los metales, haciendo que sus superficies se deformen o aparezcan otros tipo de defectos en las mismas. Si se encuentran en un ambiente exterior, el deterioro que sufren puede llegar a ser mucho mayor del esperado en un primer momento.

La corrosión es el deterioro que sufren ciertos materiales por la acción de agentes químicos, muchas veces presentes en el medio ambiente. Antes de continuar es importante diferenciar entre dos tópicos que muchas veces se confunden, o se interpretan como sinónimos de una misma situación: oxidación y corrosión.

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