Mantenimiento para tanque estacionario
El tanque estacionario es un contenedor que requiere de ciertos cuidados para evitar daños en su estructura y componentes, causados por su exposición a la intemperie.
Es importante conocer el mecanismo de un tanque estacionario, así como las diferentes válvulas que lo integran y que tienen como propósito alimentar todos los equipos de consumo de una casa o negocio.
Lo primero que tienes que identificar es el tipo de tanque que tienes, pues en México se manejan diferentes tamaños con capacidades que varían desde los 120 y hasta los 1,000 litros, dependiendo su utilidad.
Las válvulas para tanque de gas estacionario se encuentran expuestas al implacable cambio climático durante los 365 días del año, por ello, es de vital importancia contar con productos de alta calidad y garantía en el mercado.
Fecha de fabricación
Los tanques estacionarios de cualquier capacidad y marca, cuentan con una etiqueta al frente de su estructura, donde se destacan valores importantes como la fecha de fabricación, la cual debe mantener una relación entre la fecha de fabricación del tanque y la fabricación marcada de las válvulas que lo conforman.
En caso de que algunas de las fechas presenten una gran variación, es recomendable evitar su compra y solicitar al proveedor un tanque acorde a estas indicaciones.
Capacidad al 100% de agua
Este valor indica la capacidad que puede contener un tanque. Es importante nunca llenar hasta el 100% de gas un tanque estacionario, pues cuando el gas entra en estado líquido, necesita por lo menos un 20% de capacidad libre para realizar una transferencia natural de líquido a vapor, siendo esta la forma en que se alimentan tus equipos de consumo.
Al llenar un tanque al 100% de gas, se provoca una sobrepresión que obliga a la válvula de seguridad a entrar en acción para liberar la presión al exterior, en consecuencia a esto, se desperdicia el gas ya adquirido. Este proceso también provoca que el regulador de gas entre en contacto con gas líquido, y por consiguiente, un desperfecto en su funcionamiento.
Cumplimiento de la norma de fabricación
El fabricante de tanque estacionario está obligado a que todos los componentes del tanque, cumplan con la norma vigente NOM-SESH-2011, por ello, el producto debe mencionar en la placa dicha norma, sin que algún valor sea alterado o sobrepuesto.
Los tanques con una capacidad de 120 hasta 300 litros cuentan con tres válvulas que brindan suministros, seguridad y alimentación a todos tus equipos.
Válvula de llenado
Es la encargada de recibir gas en estado líquido al recipiente por medio de la conexión, también conocida en el mercado como válvula de doble-check, la cual permite el ingreso de gas para evitar su retroceso.
Válvula de seguridad
Su función es entrar en operación a través de dos etapas. Primero, cuando el tanque está recibiendo el gas líquido para su llenado, en caso de exceder el límite de presión interno del recipiente, este producto entrará en acción. La segunda acción de esta válvula entra en operación de la misma forma, cuando el recipiente está expuesto a altas temperaturas o cuando algún accidente en el inmueble desestabiliza su contenido, lo que provoca que entre de nueva cuenta en sobrepresión.
Dicha válvula puede presentarse en dos modalidades:
- Válvula de resorte en cápsula externa
- Válvula de resorte interno
A pesar de que ambas operan de la misma forma, tienen una conformación diferente. Mientras que la válvula de cápsula externa logra observarse en la parte exterior del recipiente, la válvula de resorte interno únicamente deja ver el hexágono de sujeción al recipiente, ya que todo su mecanismo se encuentra inmerso en el mismo.
Válvula de servicio
Su función es suministrar gas en estado vapor a todos los equipos de consumo conectados a la red de suministro. Su diseño integra un alambre de cobre que le permite al operador detectar el excedente de gas líquido, una vez que el llenado del recipiente ha alcanzado el 80% de su capacidad.
Válvula de drenado
Esta válvula ofrece la oportunidad al usuario de traspasar el gas líquido a otro nuevo, si es necesario el cambio definitivo y no perder el líquido contenido, por la inversión que esta representa.
Mantenimiento profesional
El mantenimiento de un tanque estacionario debe realizarse cada 5 años, a partir de su instalación o máximo a los siete años de fabricado. Este proceso debe realizarse en cualquier caso con el tanque totalmente vacío, y consiste en reemplazar de forma total y simultánea las válvulas del tanque y el regulador de gas que utilizas.
También se debe realizar una limpieza externa del recipiente, retiro de oxidación y repintado total, sobretodo para los lugares de mayor corrosión, así como el retiro de residuos que pudieran caer al retirar las válvulas en el interior del recipiente.
Para garantizar una instalación exitosa, es sumamente importante considerar que el mantenimiento debe estar en manos de un profesional, así aseguramos una instalación perfecta y libre de fugas.
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