Inicios de Rotoplas
La historia de Rotoplas inició en 1975 con un equipo muy modesto de colaboradores, pero con un enorme entusiasmo por crecer y proponer calidad.
En la década de los 90, en lo alto de los edificio y casas, en las azoteas, los tinacos de polietileno de Rotoplas empezaron a ser parte del paisaje de las ciudades de México y América Latina, por su gran capacidad para almacenar agua y abastecer las habitaciones o los pisos. En un inicio, el uso de tinacos de polietileno no fue aceptado de manera inmediata, pero al observarse los beneficios respecto a los de asbesto en cuanto a mantener en mejor calidad el agua, la población lo recibió como una gran solución de almacenamiento de agua. Desde entonces el tinaco de esta importante marca se erigió como un líder dominante en su segmento.
No obstante, Rotoplas en su constante evolución y con su misión muy clara de llevar más y mejor agua a las personas, ha trabajado durante años en el desarrollo de soluciones de agua, esto a través de la innovación. En 2019 la inversión en investigación y desarrollo fue de $72.9 millones de pesos mexicanos, gracias a esto, la empresa no ha dejado de lanzar nuevos productos y servicios de alta calidad y máximo desempeño, manteniéndose como un líder fuerte y reconocido en soluciones del agua. Una empresa mexicana que hace muy bien las cosas.
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