Fortalezas y oportunidades de la economía nacional
En los últimos años, México ha apostado muy fuerte al comercio internacional como estrategia de crecimiento, abriendo sus mercados y mostrando un mayor grado de apertura en las fronteras.
Lo anterior se ha refrendado en los últimos meses con los recientes acuerdos alcanzados con Estados Unidos y Canadá para la firma de TMEC. Lamentablemente, el país depende en gran medida de Estados Unidos, su mayor socio comercial y destino del 80% de sus exportaciones. Se trata tal vez de uno de los sectores más importantes a desarrollar y promover en los siguientes años.
La manufactura puede dividirse en industria pesada e industria liviana.
Como es sabido, el sector automotriz, aeroespacial y energía, por mencionar los más importantes, gozan de un desempeño favorable desde hace algunas décadas, situación que se debe cuidar y fortalecer. Sin embargo, la industria mediana y pequeña, es decir, los talleres y pequeñas fábricas; es ahí donde se debe incentivar el crecimiento y desarrollo urgentemente, promover la modernización de la planta productiva: mejorar el equipamiento, la capacitación técnica y la productividad.
Se trata de agregar valor a nuestras materias primas, a través de tecnología y procesos productivos que se logra superar, siempre, con la investigación en universidades y tecnológicos. Una de las industrias más importantes en México, sin duda, es la automotriz. Tras la llegada de Trump, esta industria se vio afectada debido a las amenazas del presidente estadounidense, pero, aún así, muchas automotrices optaron por invertir en México. Las inversiones extranjeras han mantenido la industria a flote, y la derrama económica que ha redituado, colocando al sector automotriz como uno de los sectores más productivos de México.
La industria turística es de las más fuertes en nuestro país por su constante crecimiento y derrama económica. México es uno de los destinos turísticos más visitados del continente, con un promedio de 25 millones de visitantes al año. También, uno de los sectores más productivos de México lo encontramos en el ramo de bienes raíces y constructoras. Invertir en la compra de departamentos, oficinas e inmuebles para su renta o posterior venta, apunta a ser uno de los negocios más rentables a mediano y largo plazo.
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