Escaleras de trabajo
Para los trabajos en las alturas existen distintas opciones, que garantizan seguridad y eficiencia de acuerdo con la tarea a realizar, por lo que en este artículo presentamos las principales consideraciones de seguridad a tener al trabajar en este medio.
En ocasiones los técnicos profesionales de diversas especialidades tienen que ejercer su tarea desde las alturas. Cuando una construcción es nueva, se necesitan labores de soldadura, anclaje, impermeabilización, pintura o incluso instalación de una red eléctrica. Asimismo, los trabajos de remodelación y las distintas tareas de mantenimiento y reparación implican ciertas tareas desde las alturas. Todas estas labores son de suma importancia y, gracias a su buena ejecución, un edificio puede mantenerse seguro y funcional durante largos periodos. Por todo esto, esta clase de tareas requiere una buena selección de herramientas y equipos, que a veces van más allá de una escalera común.
Con el simple hecho de usar el equipo correcto, se puede beneficiar tanto la eficiencia como la comodidad del trabajador
Sin embargo, también es cierto que algunas personas desconocen o simplemente no siguen la normatividad para estas tareas, por lo que se pueden cometer errores y omisiones en las mismas. La seguridad y la protección son importantes, y no sólo para resguardar la integridad de los trabajadores, sino que también facilitan los trabajos. Con el simple hecho de usar el equipo correcto, se puede beneficiar tanto la eficiencia como la comodidad del trabajador. De ahí que sea relevante usar la mejor herramienta para cada situación.
El primer error en estas labores es subestimar las medidas oficiales que establece la normatividad
Errores comunes
La NOM-009-STPS-2011 ha sido muchas veces citada en nuestra revista. Habla sobre los distintos requerimientos para trabajos en las alturas. Parte de definir que una tarea realizada a más de 1.80 m sobre el nivel de referencia se considera de altura. A partir de esta medida, se necesita un equipo particular y medidas específicas. Los equipos de protección no son opcionales en estas circunstancias, por lo que también implica un enfoque cultural acerca de los riesgos.
Los barandales se consideran medios de protección pasiva, pues el usuario no interactúa directamente con ellos, sino que sólo debe permanecer en el área de trabajo para mantenerse seguro
Uso de barandales: Más allá de la elección de una plataforma o de un andamio, se tiene que considerar el uso obligado de barandales. La norma oficial que mencionamos establece las distintas medidas dependiendo de las dimensiones de la estructura, y también contempla el área de las superficies de trabajo.
Estabilidad: En ocasiones se subestima la estabilidad de los distintos equipos para trabajar en las alturas. Tanto en escaleras como en andamios y plataformas se requieren elementos que fijen la estructura en un solo sitio. Algunas escaleras se equipan con sistemas de bloqueo o patas antiderrapantes, que benefician la estabilidad al ascender. Por otra parte, los andamios con ruedas se equipan con un mecanismo de freno que bloquea su movimiento hasta que necesite moverse para su reubicación.
Técnica de ascenso: Al subir en una escalera o en un andamio, se necesitan tres puntos de contacto en todo momento con la estructura. Cuando los andamios implican un ascenso muy alto, se deben incluir descansos cada cierta medida.
Las escaleras convencionales están diseñadas para que se trabaje desde el antepenúltimo escalón, así que, al seleccionar un equipo para el ascenso, debe contemplarse la tarea para la que será requerida
Te invitamos a disfrutar el artículo completo en nuestra edición de diciembre.
