El Bosque, 2a. sección
Chapultepec de mis amores
El Bosque de Chapultepec es el lugar más representativo de la historia y cultura de México. Su tradición es tan antigua como los primeros pobladores de la Ciudad; conforme la urbanidad se fue construyendo, éste ha sido un espacio para la manifestación cultural e indiscutiblemente para el descanso y recreación frente al estrés citadino. Su ecosistema está dividido por tres secciones, en la primera se encuentra, sobre la cima del Cerro del Chapulín y desde 1778, el Castillo, el cual dota a esta sección de un gran valor histórico-cultural (aquí se localizan los museos, monumentos e instituciones con mayor relevancia). En contraste, la tercera parte del Bosque corresponde al área inaugurada más recientemente, en 1974, que es la zona de preservación ecológica (decretada Área Natural Protegida).
Los reflejos sobre el agua trazan un paisaje tan bello como un cuadro impresionista. Pincelazos que van del azul del cielo al verde de los cedros, se mezclan y envuelven el exterior de una experiencia natural y única.
SEGUNDA SECCIÓN DEL BOSQUE DE CHAPULTEPEC
Se fundó en 1964, corresponde al espacio en donde antiguamente se cultivaba la tierra y está destinada a las actividades recreativas. Con motivo de tu visita a los RDF 2018, te invitamos a conocer esta parte del bosque urbano más grande de Latinoamérica, la cual ha perdido protagonismo frente a las otras secciones, aunque ofrece una belleza y riqueza inigualable. Cuenta con pista de atletismo, juegos infantiles, ciclopista, un skatepark dentro del Parque Constituyentes y la ya tan conocida Feria de Chapultepec.
La parte cultural está personificada a través del Paseo de los Compositores, que resume la historia de la música mexicana con bustos de los máximos exponentes líricos. Enseguida está la Fuente Monumental Xochipilli, construida en 1964 por el arquitecto Leonides Guadarrama, que se inspiró en la arquitectura Tenochca. Frente a ésta se halla la pieza más importante de esta sección, el Cárcamo de Dolores, por ser la obra hidráulica principal del Sistema Lerma, en él, Diego Rivera construyó la fuente Tláloc Totopamilt y pintó el mural “El Agua, Origen de la vida”, haciendo énfasis al simbolismo del elemento. Actualmente El Cárcamo es parte del Museo de Historia Natural, que tiene diez salas temáticas, que van desde el Universo, el origen de la vida en la Tierra, hasta la evolución del hombre.
El Papalote “Museo del niño”, diseñado por el arquitecto Ricardo Legorreta, es otro de los recintos más populares dentro de esta sección. El edificio está formado por esferas y triángulos mediante azulejos tradicionales mexicanos, además de que la construcción se pensó con el fin de que el museo fuera interactivo, como el Museo Tecnológico de la CFE (MUTEC) que cuenta con un robot con el que se puede interactuar. Es considerado el primer museo interactivo de ciencia que se creó en Latinoamérica y se enfoca esencialmente en la energía eléctrica.
La principal atracción natural de la segunda sección del Bosque de Chapultepec, sin duda alguna es el Lago Menor, ubicado al Norte del Museo de Historia Natural, y el Lago Mayor, en el que se pueden alquilar lanchas para practicar remo. En éste se localiza la Fuente Monumental, entre un paisaje dibujado por jacarandas, fresnos, cedros y aves que pasean por el agua. Esta estética es la ideal para crear una escena auténtica, que resguarda el reflejo del Restaurante El Lago, entrecruzado con la silueta de un islote, su distinguida arquitectura, de la que hablaremos en las siguientes páginas, se mueve mediante un oleaje que podremos observar con motivo del RDF 2018.
