Carga de un tanque estacionario de Gas LP
Es necesario examinar que el tanque estacionario esté en buenas condiciones, es decir, pintando en su totalidad, sin señales de corrosión, daños o reparaciones; también, habrá que asegurarse del correcto funcionamiento de todos sus componentes.
El tanque estacionario debe fijarse sobre una base sólida, nivelada y seca, de preferencia que sea de cemento, pues debe mantenerse estable. Por consiguiente, deben evitarse las superficies inseguras, lozas deterioradas o espacios que sufran de algún desgaste por el tiempo o alteración por sismos u otro desastre natural.
La cantidad máxima de gas LP con la que puede llenarse un tanque estacionario corresponde al 80 % de su capacidad total, la razón de esto reside en que el gas en estado líquido requiere de un mínimo del 20 % de capacidad libre para cambiar a estado gaseoso.
Los tanques estacionarios tienen un medidor de gas en la parte superior, con los que podemos conocer la cantidad de gas LP que tiene el tanque antes de ser rellenado, sólo que este medidor expresa la cantidad como porcentaje de la capacidad del tanque.
Al momento de pasar sobre este límite de llenado, se genera un exceso de presión al interior del tanque, lo cual, por un lado, activa la válvula de seguridad para así liberar tal presión. Es decir que el gas es expulsado al exterior, por tanto se desperdicia y contamina el ambiente, y por el otro lado, como el nivel del gas líquido es mayor, los componentes como el regulador presentan un mal funcionamiento al entrar en contacto con el combustible.
El mantenimiento constante de un tanque estacionario es importante para asegurar que cuenta con un buen estado y cumple de manera adecuada su función, sin que sea un riesgo para el usuario y su comunidad.
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